Teniente general Lic. Bernardo Santana Páez Vida y trayectoria.
Destaca aportes Policía Científica
POR SORANGE BATISTA
Redactora de Hoy
La Policía Nacional cuenta con la tecnología y los equipos necesarios para resolver cualquier hecho delictivo que ocurra a nivel nacional, gracias a la integración de avanzadas técnicas al Departamento de Policía Científica, órgano de la Dirección Central de Investigación Criminal.
Bajo la responsabilidad del coronel Héctor J. Díaz, la Policía Científica tiene un equipo de 140 personas, 45 de ellas mujeres, preparados para resolver cualquier hecho, por difícil que parezca.
Cuentan además con el apoyo de los expertos españoles Valentín Solís y Fernando Álvarez, los cuales, como personal de apoyo, colaboran en los trabajos de laboratorio y entrenan al nuevo personal.
Díaz aseguró que como departamento están en capacidad de dar respuesta en todo lo que es huellas dactilares que se puedan encontrar en la escena del crimen y hacer comparación con la impresión que se toman a sospechosos.
En Serología Forense cuentan con los mecanismos y el personal para determinar sin un fluido en sangre humana o animal, y en casos de violaciones sexuales saber si hay presencia de semen o no.
En balística, la Policía Científica hace comparaciones tanto de casquillos como de proyectiles “y hemos hecho algo que nunca se había realizado en la policía, hacer una búsqueda en los archivos de evidencias que estaban allí y hacer comparaciones entre ellas”, agregó.
En ese sentido los técnicos han podido establecer que un arma de fuego ha sido utilizada en diferentes hechos criminales, y de 93 casos en los cuales han encontrado evidencias en las que armas de fuego han sido empleadas en más de 40 casos de personas muertas y más de 50 heridas.
La labor de la Policía Científica tiene dos vertientes: la parte técnica, que en la cual el personal agota todos los mecanismos cuando acude a la escena del crimen y encuentra que es procesada haciendo la recolección de evidencias; y la otra es la parte científica que es la que se agota cuando esos hallazgos son analizados en los laboratorios, ubicados dentro del Palacio de la Policía.
HUELLAS EN LA ESCENA
Los técnicos se trasladan a la escena con un equipo que tiene todo lo necesario para procesarla las huellas. Al llegar la primera labor de los técnicos es observar para tener una idea preliminar de lo que ocurrió, “el mismo escenario da pista”.
Cuando se trata de huellas dactilares se buscan, primeramente, los lugares que aparentan haber sido violentados, se procede a la aplicación del reactivo o químico, que dependiendo de la superficie en que se encuentre puede ser diferente color o material.
Para ello tienen a su disposición diferentes tipos de materiales como el polvo de grafico negro, polvo de limadura de hierro y otros, así como las brochas para su aplicación que puede ser imantada, de fibra de vidrio o de pelo de camello.
“Al aplicar ese polvo hacen el revelado de la huella, eso es que la hacen visible y mediante una cinta transparente, especial para eso, levantan la huella y la pasan a otra superficie que es en la que se hace la comparación” explicó el oficial.
La huella es analizada en el laboratorio por un personal calificado, que las compara de modo automatizado. “no es como en las películas que de inmediato aparece a quien corresponde, la realidad es que se muestran de diez a quince candidatos posibles y entre ellos se hace la comparación”, aclaró.
Explicó que hay casos en los que esa huella no está registrada en la base de datos que tienen disponible debido a que hay personas por tener poco tiempo delinquiendo no tienen registros, pero, como la criminalística es comparativa podría haber una persona sospechosa y entonces se procede a citarlo y se le toma la impresión para cotejarla con la encontrada.
En relación a las huellas dactilares también se utiliza el Rubis, que es un lente óptico que permite al técnico observar cualquier huella latente que haya en la escena. Se procede a marcarla con un marcador especial y luego se efectúa el procedimiento de lugar con el polvo de rigor.
Otra tecnología con que cuenta la PN para resolver casos son las luces forenses, las que juegan un papel importantísimo al momento de detectar cualquier flujo corporal en la escena, que no esté viaje.
Esas luces tienen varios filtros adecuados a cada caso.
Además es de rigor para los técnicos la utilización de pisos falsos, que sirven para caminar sobre la escena sin contaminarla.
Trascripción del artículo publicado en el periódico Hoy, domingo 14 de julio de 2007. Página 7.
